Nu se pretează? Nu contează! La noi puteți returna bunurile în 30 de zile
Cu un voucher cadou nu veți da greș. În schimbul voucherului, destinatarul își poate alege orice din oferta noastră.
30 de zile pentru retur bunuri
Nunca en la monarquía española la difamación alcanzó cotas tan altas c omo en el caso de la reina María Luisa de Parma (1751-1818), esposa de Carlos IV. Desde aquellos que atribuyeron la paternidad de sus dos úl timos hijos a Godoy, pasando por el recelo de su hijo Fernando, futuro rey, para quien las infidelidades de su madre suponían un riesgo para la sucesión a la Corona, o Napoleón, que vio en ella las lacras del A ncien Régime -como nieta que era del libertino Luis XV-, hasta llegar a Espronceda, que la definió como «impura prostituta».Pérfida, intriga nte, vulgar, sedienta de lujuria para muchos. La suspicacia alcanzó, i ncluso, a su abúlico marido. Pero ¿cuál fue la verdad?Carmen Güell rec oge los hechos con sutileza para que el lector saque sus propias concl usiones. Evoca los sentimientos de María Luisa como vivaz princesa ita liana enfrentada a la nobleza española -a cuyo frente estaba la Duques a de Alba- que despertó la intriga en el puritano entorno de Carlos II I. Tras el motín de Esquilache y la expulsión de los jesuitas, relata el drama de una mujer, ya en el trono, que creyó encontrar en un apues to e inteligente guardia de Corps extremeño al valido ideal para un co nvulso país. Tiempo en el que tiene lugar el motín de Aranjuez, la inv asión napoleónica, la Falsa de Bayona y la Guerra de la Independencia. Una reina que, tras sufrir catorce abortos y parir diez hijos, es trai cionada por su heredero y muere en Roma bajo sospecha de haberse aprop iado de los «diamantes de la Corona». Corona que perdió por salvar a G odoy, quien, según Pepita Tudó, su amante y segunda esposa, «sólo tuvo un único amor: la reina».